Fin de semana en la marmita de Ahlam, solitos sin niños, sin prisas y con ganas de disfrútalo a tope. Busquemos un sitio donde respirar aire puro y que reine el silencio, donde solo el sonido de los animales, sobresalten nuestros sentidos, y encontremos el sitio perfecto.
La Marmita de Ahlam se sitúa en el valle de Fondón en Benecid, con unas magníficas vistas hacia la Alpujarra Almeriense y rodeado de encinas y olivos.
Es un complejo único con todos los servicios a nuestro alcance, que cuenta también con restaurante y piscina.
Como podéis observar, la habitación es una preciosidad y decorada con muy buen gusto.
La piscina es un lujo en este hotel rural, contemplando las montañas de Sierra de Gádor y al valle de Fondón.
Eso si el agua estaba helada, pero hay que tener en cuenta que estamos en la sierra...
Después de pasar la tarde en la piscina en remojo, en una refrescante agua, pasemos por la bañera para ponernos guapos e ir a cenar al restaurante del complejo.
Como veréis su terraza tiene unas magníficas vistas, y por la noche es espectacular cenar a la luz de las velas.
Para cenar pedimos una ensalada, una pizza y unos raviolis con gambas de Garrucha.
El complejo cuenta con un espacio espectacular para celebraciones como bodas y comuniones.
Lo dicho, un sitio recomendable para desconectar del bullicio de la ciudad, para disfrutar de aire puro y de un paisaje espectacular.
¿Conocíais este precioso hotel?
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