Dia de los enamorados en Mojácar

 

Aprovechemos que ese fin de semana no trabajaba y cogimos las maletas y rumbo a Vera. 

Cogimos el hotel Adaria Vera que es un hotel de 4 estrella, ubicado en Puerto Rey, a 8 km de Vera y a 200 metros de la playa de Puerto Rey. 

Cogimos Media pensión para poder aprovechar las mañanas por las cercanías y nos pilló en vísperas de San Valentín conque los disfrutemos al máximo.

 

La habitación que nos dieron era estupenda, una gran cama, y un sofá cama al lado. Un mini frigorífico y un aseo grande. 

Como Mojácar estaba al lado, decidimos visitarla y nos recibió el amor que estaba en el aire. 

Un pueblo decorado para la ocasión, para recibir a cupido y sus enamorados. 

Mojácar fue elegida por Ferrero Rocher para iluminar su pueblo por navidad, y como había quedado tan bonita, decidieron alargar un poco más la iluminación navideña y aprovechar San Valentín para que los visitantes disfrutaran de ambas fiestas a la vez. 

El Indalo representa a una figura humana con los brazos extendidos y un arco sobre sus manos, y es considerado como un símbolo de buena suerte   en la provincia de Almería. 

Y tras pasar la plaza, con sus luces de Navidad...

Llegamos a los sitios inspirados en el amor en honor al San Valentín, patrón de los enamorados.

Tiendas decoradas con exquisito gusto, imposible de no salir enamorado de sus detalles. 

El amor estaba en el aire, y repartiendo chuches y amor entre sus visitantes y como no, una foto de recuerdo.

Las estrellas también son signos de buena suerte, conque que mejor que estar bajo su poder... 

Todos los rincones de Mojácar inspiraba amor con sus preciosas decoraciones en tonos rojos pasión.

Las mujeres mojaqueras cubrían su rostro con paños, sujetando el borde con los dientes, mientras trepaban haciendo malabarismos con sus cántaros llenos de agua. 

Y para terminar la visita a este maravilloso pueblo, nada mejor que en las puertas de su iglesia y su decoración Navideña, que ha llegado a visitar miles de almeriense y del resto del mundo. 

Y de vuelta al hotel, nos recibió Cupido con una foto y una cena de San Valentín. 

Espero que os haya gustado la visita tanto como a mí y os invito a que vengáis por este precioso pueblo a la orilla del Mediterráneo que os sorprenderá por la hospitalidad de sus lugareños y sus preciosas vistas. 

¿Conocíais Mojácar?